¡Hemos llegado a Alpha Centauri!

Ray Bradbury lee su poema «If Only We Had Taller Been» en Jet Propulsion Laboratory de la NASA, en 1971, para celebrar la misión Mariner 9, acompañado por Arthur C. Clarke y Carl Sagan.


If Only We Had Taller Been
The fence we walked between the years
Did bounce us serene.
It was a place half in the sky where
In the green of leaf and promising of peach
We’d reach our hands to touch and almost touch the sky,
If we could reach and touch, we said,
‘Twould teach us, not to, never to, be dead.
We ached and almost touched that stuff;
Our reach was never quite enough.
If only we had taller been,
And touched God’s cuff, His hem,
We would not have to go with them
Who’ve gone before,
Who, short as us, stood tall as they could stand
And hoped by stretching, tall, that they might keep their land,
Their home, their hearth, their flesh and soul.
But they, like us, were standing in a hole.
O, Thomas, will a Race one day stand really tall
Across the Void, across the Universe and all?
And, measured out with rocket fire,
At last put Adam’s finger forth
As on the Sistine Ceiling,
And God’s hand come down the other way
To measure man and find him Good,
And Gift him with Forever’s Day?
I work for that.
Short man, Large dream, I send my rockets forth
between my ears,
Hoping an inch of Good is worth a pound of years.
Aching to hear a voice cry back along the universal Mall:
We’ve reached Alpha Centauri!
We’re tall, O God, we’re tall!

RayBradbury

Solo que hubiéramos sido un poco más altos

La valla que recorrimos durante años,
nos hizo saltar serenos;
era un lugar a mitad de camino del cielo donde,
entre el verde de la hoja y la promesa del fruto
alzábamos las manos para alcanzar, casi alcanzar el cielo,
si pudiéramos estirarnos y tocar, decíamos,
aprenderíamos a no morir nunca.
A duras penas casi pudimos rozarlo
Solo que hubiéramos sido un poco más altos
tocaríamos el puño de la camisa, el dobladillo de Dios,
no tendríamos que ir con ellos.
con los que se fueron antes
Aquellos que, pequeños como nosotros,
se erguieron tanto como pudieron.
Con la esperanza de que al estirarse, podrían mantener su tierra,
su casa, su corazón, su cuerpo y su alma,
Pero, como nosotros, estaban sobre el abismo.
Ay, Tomás, ¿habrá una raza que algún día se alce
a través del vacío, del universo y de todo?
¿Y, medido con el fuego de un cohete
por fin ponga el dedo de Adán más arriba
como en la bóveda de la Capilla Sixtina,
y la mano de Dios vendrá del otro lado
para medir al hombre y hallarlo bueno
y entregarle el día eterno?
Trabajo para eso.
Hombre pequeño, sueño grande
Lanzó mis cohetes más lejos
entre mis oídos
esperando que una pulgada de Bien valga una libra de años
ansiando escuchar una voz que me responda desde el universo:
¡Hemos llegado a Alpha Centauri!
¡Somos altos, oh Dios, somos altos!

La sonda InSight de la NASA aterrizó ayer en Marte y ha enviado la primera fotografía. Pocos han amado tanto el planeta rojo como lo hizo Ray Bradbury que pidió que sus cenizas fueran esparcidas en él. Un buen momento para leer o releer las Crónicas marcianas.

THE MARTIAN CHRONICLES

Los Colonizadores – Agosto de 2001 (The Settlers, 1950)
The Martian Chronicles

Llegaron porque tenían miedo o porque no lo tenían, porque eran felices o desdichados, porque se sentían como los Peregrinos, o porque no se sentían como los Peregrinos. Cada uno de ellos tenía una razón diferente. Abandonaban mujeres odiosas, trabajos odiosos o ciudades odiosas; venían para encontrar algo, dejar algo o conseguir algo; para desenterrar algo, enterrar algo o alejarse de algo. Venían con sueños ridículos, con sueños nobles o sin sueños. El dedo del gobierno señalaba desde letreros a cuatro colores, en innumerables ciudades: HAY TRABAJO PARA USTED EN EL CIELO. ¡VISITE MARTE! Y los hombres se lanzaban al espacio. Al principio sólo unos pocos, unas docenas, porque casi todos se sentían enfermos aun antes que el cohete dejara la Tierra. Y a esta enfermedad la llamaban la soledad, porque cuando uno ve que su casa se reduce hasta tener el tamaño de un puño, de una nuez, de una cabeza de alfiler, y luego desaparece detrás de una estela de fuego, uno siente que nunca ha nacido, que no hay ciudades, que uno no está en ninguna parte, y sólo hay espacio alrededor, sin nada familiar, sólo otros hombres extraños. Y cuando los estados de Illinois, lowa, Missouri o Montana desaparecen en un mar de nubes, y más aún, cuando los Estados Unidos son sólo una isla envuelta en nieblas y todo el planeta parece una pelota embarrada lanzada a lo lejos, entonces uno se siente verdaderamente solo, errando por las llanuras del espacio, en busca de un mundo que es imposible imaginar. No era raro, por lo tanto, que los primeros hombres fueran pocos. Crecieron y crecieron en número hasta superar a los hombres que ya se encontraban en Marte. Los números eran alentadores. Pero los primeros solitarios no tuvieron ese consuelo.

Entrevista a Ray Bradbury

A propósito de Crónicas marcianas

Mars satelite establoPegaso

Sonda orbital Mars Reconnaissance Orbiter

“Vendrán las lluvias suaves y el olor a tierra / Y el leve ruido del vuelo de las golondrinas…” dice el poema de Sara Teasdale que Ray Bradbury incluye en el relato de Crónicas Marcianas titulado “There Will Come Soft Rains” (Vendrán lluvias suaves).

Y a propósito de Crónica marcianas, la NASA anunció ayer que existen pruebas sólidas de la presencia de agua líquida en Marte. En las imágenes tomadas por la sonda orbital Mars Reconnaissance Orbiter se detectaron vetas superficiales descendentes con variaciones estacionales en las colinas marcianas, lo que se interpreta como un indicio de la existencia de corrientes de agua líquida. Con la llegada del verano al planeta rojo aparecen estos flujos lineales avanzando por sus laderas y cuando llegan las estaciones frías se desvanecen.

Las capas de estos acantilados marcianos muestran enterrados depósitos de hielo en la región polar sur de Marte cerca Ulyxis Rupes en alrededor de 72 ° S / 162 ° E. La imagen fue obtenida por la Mars Express el 15 de enero 2011 usando la Alta Resolución

Las capas de estos acantilados marcianos muestran enterrados depósitos de hielo en la región polar sur de Marte cerca Ulyxis Rupes en alrededor de 72 ° S / 162 ° E. La imagen fue obtenida por la Mars Express el 15 de enero 2011 usando la Alta Resolución

Y a propósito de Marte, vamos a recordar a Bradbury y a la poeta Sara Teasdale con el poema de «Vendrán lluvias suaves» incluido en «Flame and Shadow»

«Ya que usted no expresa su preferencia, elegiré un poema al azar». Comenzó a oírse una suave música de fondo. «Sara Teasdale. Según recuerdo, su favorito…»
Vendrán las lluvias suaves y el olor a tierra
Y el leve ruido del vuelo de las golondrinas
El canto nocturno de los sapos en los charcos
La trémula blancura del ciruelo silvestre
Los ruiseñores con sus plumas de fuego
Silbando sus caprichos en la alambrada
Y ninguno sabrá si hay guerra
Ni le importará el final, cuando termine
A nadie le importaría, ni al pájaro ni al árbol,
Si desapareciera la humanidad
Ni la primavera, al despertar al alba,
Se enteraría de que ya no estamos.

El fuego ardía en la chimenea de piedra y el cigarro cayó en un montículo de ceniza en el cenicero.

marte

The voice said at last, «Since you express no preference, I shall select a poem at random. «Quiet music rose to back the voice. «Sara Teasdale. As I recall, your favorite….

There will come soft rains and the smell of the ground,
And swallows circling with their shimmering sound;
And frogs in the pools singing at night,
And wild plum trees in tremulous white;
Robins will wear their feathery fire,
Whistling their whims on a low fence-wire;
And not one will know of the war, not one
Will care at last when it is done.
Not one would mind, neither bird nor tree,
If mankind perished utterly;
And Spring herself, when she woke at dawn
Would scarcely know that we were gone.

The fire burned on the stone hearth and the cigar fell away into a mound of quiet ash on its tray.

Curiosity establopegaso

Robot Curiosity NASA/JPL-Caltech

Artículo de Lujendra Ojha et al., “Spectral evidence for hydrated salts in recurring slope lineae on Mars,” Nature Geoscience, AOP 28 Sep 2015